La Asamblea de la Federación Odontológica Latinoamericana (FOLA), estableció el 5 de diciembre como el Día Latinoamericano de Lucha Contra el Cáncer Bucal, con el fin de promover el cuidado de la salud bucal e informar sobre los síntomas y factores de riesgos de esta enfermedad.
El Cáncer Bucal es uno de los diez cánceres más frecuentes a nivel mundial y puede pasar desapercibido en sus primeros estadios, porque las lesiones que primero aparecen en la cavidad bucal no generan gran dolor: manchas blancas o rojas, bultos en el cuello, lengua o paladar o úlceras en los labios o boca que no curan.
Pablo Dorati, odontólogo especialista en Cáncer Bucal, resalta “no hay que desestimar estas pequeñas señales, es de suma importancia examinar la cavidad bucal, implica mirar y palpar”. El screening del cáncer bucal no requiere de estudios o pruebas complejas, sino todo lo contrario: con la inspección y la palpación de la mucosa bucal es suficiente. “Uno no pretende que el odontólogo general realice el diagnóstico del cáncer, pero sí que active o ponga en marcha los mecanismos de consulta y derivación, al ver en la boca de un paciente algo que cree no es normal”.
Existe una semiología, es decir, signos clínicos que reciben el nombre de lesiones elementales con las que la enfermedad se presenta. El conocimiento de estas lesiones a partir del entrenamiento continuo favorece la sospecha y el hallazgo de la enfermedad. “Los bordes de la lengua se llevan un alto porcentaje de presencia de Cáncer, por eso siempre deben ser examinados, esto no exceptúa que pueda aparecer en otras partes de la boca” enfatiza Dorati.
Los síntomas más frecuentes son:
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Pérdida de dientes espontáneas.
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Manchas blancas o rojas en lengua o garganta.
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Bultos en el cuello, lengua o paladar.
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Úlceras en los labios o boca que no curan.
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Dolor constante al tragar o masticar.
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Posible dolor de oído.
¿Cuáles son los factores de riesgo?
Los principales son el tabaco en cualquiera de sus formas, el exceso de alcohol, la radiación solar -íntimamente relacionada con el cáncer de semimucosa labial-, ciertos Virus del Papiloma Humano (VPH) -con evidencia conocida y demostrada en el cáncer de orofaringe.
También se puede considerar un factor a tener presente el Microtrauma crónico persistente o Irritación mecánica crónica de la mucosa bucal (elementos dentales deteriorados, prótesis defectuosas, inflamación crónica, isquemia transitoria crónica), y también las denominadas Enfermedades cancerizables o Desórdenes potencialmente malignos de la mucosa bucal, el Dr. Dorati explica “creemos conveniente aclarar que no son cáncer sino factores de riesgo que pueden avanzar a cáncer si no se diagnostica e inicia un tratamiento acorde”.
Existen,desde hace mucho tiempo, tratamientos clásicos como la cirugía, la radioterapia y la quimioterapia. “Debe tenerse en cuenta que cuanto más avanzado sea el estadio en que la enfermedad se diagnostica mayor costo biológico, emocional, psíquico-social y estético-funcional tendrán estos tratamientos” sugiere Dorati.
¿Cómo debemos informar y acompañar a nuestro paciente ante la posibilidad de tener que encarar un tratamiento contra el cáncer bucal?
Desde nuestro lugar de profesionales de la salud bucal, es fundamental ser claros y acompañar a nuestro paciente en el tratamiento. Si el cáncer es detectado a tiempo, es mayor la posibilidad de ser curado.
Una vez diagnosticada la enfermedad, la boca del paciente debe prepararse para abordar el tratamiento. El Dr. Dorati recomienda que “la odontología general acompañe a la estomatología y a la oncología”. ¿De qué manera? “deben instaurarse medidas preventivas para evitar las complicaciones del mismo y realizar el control y seguimiento de las cicatrices oncológicas quirúrgicas, las cicatrices por radioterapia (radiodistrofia) y por quimioterapia. Es sumamente importante no introducir el microtrauma como promotor de cáncer en una mucosa que ya se presenta molecularmente iniciada para el desarrollo de la enfermedad.” concluye el Doctor.