Mamá de Facundo y Santiago de 10 y 3 años respectivamente, y recibida de la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de La Plata (FOLP), la Dra.María José Levalle cuenta con una vasta experiencia en el cuidado de la salud bucal de los niños. Su recorrido académico está ligado a la docencia dentro de la universidad, ya que hace más de 16 años que forma parte de la asignatura de Odontología Integral Niños A.
Su interés por la temática en la que se especializa hace que se capacite de manera constante. Hoy, espera ansiosa la defensa de su trabajo final, que la posicionará como una de las dos primeras Especialistas Nacionales en Odontopediatría de la FOLP.
En torno a su profesión la Dra. Levalle nos cuenta que: “No solamente trabajamos con la salud, sino que trabajamos con algo tan importante como la sonrisa. Muchas veces tenemos la oportunidad de devolverle la sonrisa a nuestros pacientes y eso es algo muy gratificante para mí”.
Con respecto a su especialidad sostiene que: “Siempre me gustó la parte de pediatría y tuve muy en claro que me gustaba trabajar con chicos”, y agrega: “Desde la odontopediatría trabajo mucho con la familia y veo a los chicos crecer. Lo que más me gusta es cuando empiezo con el bebé, porque formo un vínculo de confianza con la familia”.
La Dra. Levalle hace un análisis muy interesante sobre una problemática con la que se encuentra de manera cotidiana en su consultorio, que está ligada a la falta de información por parte de la sociedad. “Hay un gran desconocimiento en cuanto a la primera consulta del niño con el odontólogo, porque creen que es a los tres años y en realidad tendría que ser paralelo a la primera consulta con el pediatra”, y agrega que: “A los tres años llegaste tarde, porque te perdiste la oportunidad de educar y así prevenir, y te encontras con caries a edades muy tempranas. Esto se puede evitar si le brindamos a los padres pautas claras sobre higiene y alimentación. La idea es preparar el terreno y sea óptimo para que cuando hagan erupción los dientes, sea en condiciones que aseguren salud. Es necesario hacer un trabajo más en conjunto con los pediatras, para fomentar la derivación”.
Con respecto a su vínculo con la AOB, la Dra. Levalle encuentra una identificación con con la institución a través de los valores que sostienen su profesión, ligados a la responsabilidad social como odontóloga. “Me encanta ser parte de la agremiación y valoro mucho todo el trabajo que se hace, por ejemplo, desde el DES. Para mi es importantísimo porque llevan salud a chicos que no tienen las posibilidades. Ir a campo me parece que es sumamente necesario y no todos lo hacen” y agrega que: “La AOB te permite trabajar en equipo y es de la única manera para que las cosas salgan bien. Además, el trato por parte de ellos es muy cálido y siempre me respaldaron”.